miércoles, 17 de marzo de 2021

 

    



ENTRENAMIENTO MENTAL

(Tomado de mi libro Guía de Oratoria Forense, ed. Wolters Kluver. Las citas se refieren al libro Institutio Oratoria de Quintiliano de Calahorra)


La meditación y el repaso mental de lo que tenemos que decir con posterioridad no sólo son punto de partida, sino que también sirven de manera relevante como estrategia para fijar en la memoria y digamos «escribir mentalmente» la intervención posterior, proporcionando, además de memoria, agilidad, soltura y conocimiento excelente de la propia intervención:

«Escribir y pensar están muy cerca, y este recibe de aquel fuerza y se encuentra en el medio entre el trabajo de escribir y la contingencia de la improvisación, y me parece que de más frecuente uso. Porque ni en todas partes ni siempre podemos escribir, mas para meditar hay muchísimo tiempo y muchísimos lugares».

Proxima stilo cogitatio est, quae et ipsa vires ab hoc accipit, estque inter scribendi laborem extemporalemque fortunam media quaedam et nescio an usus frequentissimi. Nam scribere non ubique nec semper possumus; cogitationi temporis ac loci plurimum est. Inst. X, 6, 1


-«Y no sólo dispone ella dentro de sí misma (la meditación) el orden de las cosas, lo cual solo bastaría, sino que relaciona entre sí las palabras, y de tal suerte entreteje todo el discurso, que no falta sino la mano que lo escriba. Pues muchas veces se fija más fielmente en la memoria lo que no se deja al abrigo de la escritura».

Neque vero rerum ordinem modo, quod ipsum satis erat, intra se ipsa disponit, sed verba etiam copulat totamque ita contexit orationem, ut ei nihil praeter manum desit. Nam memoriae quoque plerumque inhaerent fidelius, quae nulla scribendi securitate laxantur. Inst. X, 6, 2


Repasar mentalmente lo que hay que exponer puede parecer ejercicio tedioso e ineficaz, pero una vez adquirida la costumbre de ejercitarlo, se convierte en un seguro medio para afianzar y  fijar estructuras y contenidos. Como en otras ocasiones, vuelve Quintiliano a aconsejar el trabajo continuo para conseguir tanto esta habilidad como la memoria:


- «Pero no se puede llegar ni de repente ni rápidamente a conseguir esta capacidad de pensar».

Sed ne ad hanc quidem vim cogitandi perveniri potest aut subito aut cito. Inst. X, 6, 2

- «Mas si alguno me pregunta cuál es la única y la más principal regla para aprender de memoria, le diré que el ejercicio y el trabajo; aprender mucho de memoria, meditar mucho, y si se puede hacer a diario, es el medio más poderoso».

Si quis tamen unam maximamque a me artem memoriae quaerat, exercitatio est et labor; multa ediscere, multa cogitare, et si fieri potest cotidie, potentissimum est.  Inst. XI, 2, 40

 

La única y la más principal regla para aprender de memoria consiste en el ejercicio y el trabajo

 

Propone nuestro autor una técnica de entrenamiento mental sencilla, pero segura, para desarrollar la capacidad mental de meditar y repasar mayor cantidad cada vez de discurso o del asunto que se trate.

Comienza recomendando una vez más escribir, en tanto que la escritura ayuda a fijar de manera extraordinaria lo que de otra manera quedaría difuminado y poco delimitado, mientras que al ponerlo en palabras se contextualiza y se marcan sus márgenes. La escritura ordena el pensamiento, le impone una estructura que, además de organizarlo, va a facilitar el aprendizaje y la memorización.

Recomienda empezar por pocas cosas, no acaparar contenidos, sino ir aumentando progresivamente la capacidad de abarcar más contenido y dificultad, aunque con el cuidado de que aquello que sobrevenga de improviso no se escape:


1.        «Pues en primer lugar se ha de adquirir mediante la escritura una cierta estructura que podamos seguir también cuando pensamos».

Nam primum facienda multo stilo forma est, quae nos etiam cogitantes sequatur; Inst. X, 6, 3

2.        «Después, hay que irse habituando paulatinamente, de modo que primero abarquemos pocas cosas, de las que podamos fielmente dar razón».

Tum adsumendus usus paulatim, ut pauca primum complectamur animo, quae reddi fideliter possint. Inst. X, 6, 3

3.        «A continuación, mediante incrementos moderados que no hagan sentir el ejercicio como pesado trabajo, se debe aumentar esta capacidad y mantenerla con intenso ejercicio, que se apoya en gran medida en la memoria».

Mox per incrementa tam modica, ut onerari se labor ille non sentiat, augenda vis et exercitatione multa continenda est, quae quidem maxima ex parte memoria constat. Inst. X, 6, 3

4.        «Pero si acaso a alguno le sobreviniera mientras está hablando un pensamiento brillante, no hay que aferrarse supersticiosamente a lo ya pensado… Pues prefiero la temeridad de una improvisación que algo ya pensado pero no coherente».

Sed si forte aliquis inter dicendum effulserit extemporalis color, non superstitiose cogitatis demum est inhaerendum… Alioqui vel extemporalem temeritatem malo quam male cohaerentem cogitationem. Inst. X, 6, 5.6

 

La escritura ordena el pensamiento y facilita el aprendizaje y la memorización

 

Este tipo de entrenamiento resulta fácilmente accesible y se puede entrenar en cualquier momento, aunque requiere constancia, o mejor dicho, la constancia y asiduidad en su práctica proporcionará los efectos a los que se refiere Quintiliano.

De lo que hasta aquí se ha tratado no es de la memorización, tema que procederá a continuación, sino de la organización mental del asunto que se ha de exponer. Una buena estructura del tema ayudará tanto a su memorización como a su exposición, así como también a la recepción adecuada por parte del auditorio, que recibe y entiende mejor lo que se le presenta como estructurado que lo desorganizado.

El entrenamiento mental, el repaso de lo que se ha de actuar y decir, provee de mayor agilidad en su aplicación, pero también, y no olvidemos que la retórica siempre busca efectividad, en la manera en que será recibido por quienes escuchan. El dominio de una materia o de la presentación de la misma causa efecto inmediato en quien lo percibe.